Una start-up portuguesa aspira a liderar la producción de bioetanol de segunda generación

La start-up Stex fue distinguida con los premios Born from Knowledge (BfK), otorgados por la Agencia Nacional de Innovación de Portugal (ANI), en la 7ª Edición del Premio Agrícola Crédito al Emprendimiento e Innovación. Stex desarrolla tecnologías verdes para la producción de biocombustibles líquidos a partir de residuos. Stex opera una planta piloto dentro de las instalaciones de la Unidad de Bioenergía y Biorrefinerías del Laboratorio Nacional de Energía y Geología (LNEG) y prevé poner en marcha una biorrefinería en la Península Ibérica para la producción de bioetanol y otros productos a partir de materiales lignocelulósicos. El innovador proceso de Stex no parte de azúcares (tecnología dominante en Brasil) ni carbohidratos (tecnologías de Europa y EE. UU.). La solución de Stex se basa en la transformación de residuos forestales, agrícolas o urbanos en bioetanol. Los clientes de Stex son distribuidores de combustibles, que bajo la RED II deben incorporar al menos un 0,2% de bioetanol en sus productos ya en 2022, un 1% en 2025 y un 3,5% en 2030. El objetivo es que en 2030 es que un 14 % de energía consumida en el transporte sea renovable, en el 2019 la energía renovable real en el transporte apenas superaba el 6% . Con la creciente demanda de este tipo de biocombustible, Stex revela que, solo en Europa, el mercado potencial puede alcanzar los 15.000 millones de euros. La previsión de facturación de Stex para 2020 es de medio millón de euros, fruto de desarrollos con empresas portuguesas, pero con el inicio de la primera biorrefinería y la venta de biocombustible avanzado, la facturación podría alcanzar los seis millones de euros. Después de varios años de desarrollo de la tecnología en Brasil, en 2019 instalaron una unidad piloto en Europa, en el campus Lumiar do LNEG en Lisboa. La unidad está en funcionamiento a  escala de una biorrefinería comercial. Stex está validando el proceso para residuos forestales (Portugal), restos de la industria y poda del olivo y residuos sólidos urbanos (RSU). En los próximos dos años, el objetivo es construir en Portugal la primera biorrefinería de la Península Ibérica, y en 10 años, 10 en la península. El proceso desarrollado por Stex da un destino sostenible a los residuos forestales, agrícolas o urbanos y posibilita  el uso de un biocombustible que puede reducir las emisiones de CO2 hasta en un 95% en comparación con los fósiles.