El Parlamento Europeo avala el papel del bioetanol sostenible
Los eurodiputados rechazan los intentos de limitar aún más los biocombustibles sostenibles y permiten que los Estados miembros de la UE continúen reemplazando la gasolina fósil importada con bioetanol sostenible doméstico.
El Parlamento Europeo votó hoy para mantener un papel limitado pero vital para el bioetanol renovable en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero del transporte de la UE.
Los eurodiputados rechazaron las enmiendas que habrían impuesto más restricciones a los biocombustibles basados en cultivos europeos, que ya tienen un tope máximo del 7 % de la energía vial y ferroviaria de los Estados miembros y están sujetos a estrictos criterios de sostenibilidad. Las restricciones adicionales habrían dificultado que los Estados miembros alcanzaran sus objetivos de descarbonización y habrían abierto la puerta a más importaciones de combustibles fósiles. Los eurodiputados votaron ampliamente para mantener el límite existente, en línea con la propuesta de la Comisión.
“El Parlamento Europeo ha ignorado sabiamente una avalancha de afirmaciones engañosas sobre la sostenibilidad de los biocombustibles europeos como el etanol renovable y, en cambio, apoyó el papel continuo de esta importante fuente de energía renovable en la descarbonización del transporte de la UE”, dijo David Carpintero, Director General de ePURE, la asociación europea de energías renovables.
El biorrefino tiene una contribución estratégica a la seguridad alimentaria y la independencia energética de la UE. Gracias a la generación de bioetanol en Europa se produjeron unos 4,48 millones de toneladas de alimentos para animales ricos en proteínas, alimentos que habrían requerido importaciones de terceros países fuera de la UE.
La industria del biorrefino para obtener bioetanol y piensos valoriza el cereal europeo transformado este en bioetanol (independencia energética) y proteínas concentradas, esta últimas de alto valor en la alimentación ganadera y que compiten favorablemente con la soja importada (independencia alimentaria).
El bioetanol de residuos o cultivo sostenible podría ser una solución nacional inmediata, rentable, sostenible y socialmente inclusiva. Reducir la producción de biocombustibles es un error político, aunque se produzca el esperado auge de los vehículos eléctricos y de hidrógeno, los coches de gasolina y diésel seguirán circulando por las carreteras europeas durante las próximas décadas, reducir la dependencia del petróleo de toda esa flota debiera ser una prioridad.
Eliminar una energía autóctona como el bioetanol abre la puerta a una mayor dependencia de los combustibles fósiles y a perder una nueva oportunidad para nuestra industria rural agroalimentaria.
A medida que comiencen las negociaciones finales entre la Comisión Europea, el Parlamento y los Estados miembros, desde Bio-E trabajaremos para garantizar que se preserve este papel de los biocombustibles sostenibles, convencidos que cualquier otro camino que conduzca a una mayor importación de combustibles fósiles es económica y medioambientalmente inaceptable.
