Análisis del ciclo de vida en motores: bioetanol con motor híbrido, la solución más sostenible
La descarbonización del transporte por carretera de la UE requerirá una gama de soluciones de reducción de emisiones, que incluyen no solo la electrificación sino también combustibles renovables sostenibles como el Bioetanol.
Apostando exclusivamente por la electrificación de la flota de automóviles como una solución de descarbonización, la dirección favorecida en el paquete ‘Fit for 55’ de la Comisión Europea, la UE corre el riesgo de aumentar considerablemente el costo de propiedad de los vehículos y, por lo tanto, de excluir grandes sectores de la población. Los defensores del vehículo eléctrico (BEV) sostienen que estos alcanzaron la paridad de precios con los vehículos convencionales en muchos países, pero ello es debido a esquemas de subsidios que son una carga cada vez mayor para los gobiernos y que no se dirigen a las soluciones que aporta un mayor grado de descarbonización ni a las rentas que más lo necesitan.
A pesar del relevante importe de los paquetes de ayuda al BEV (que llegan a alcanzar en algunos paises los 10.000€ por vehículo) dado que los europeos compran principalmente en el mercado de automóviles de segunda mano, la penetración de los BEV se mantiene baja.
Con el MIX energético Europeo un vehículo eléctrico puede abatir en torno a un 35% de los gases de efecto invernadero frente a uno de combustión (incluso menos si se hace un riguroso análisis de emisiones en la cadena de fabricación, donde el BEV sale mal parado). El bioetanol europeo reduce en un 72% el CO2 que emite un vehículo de gasolina. Dedicar el subsidio de 5.000€ de la compra de un costoso BEV permitiría subvencionar un carburante líquido renovable para que las rentas bajas viajen gratis en su coche particular durante ¡5 años!. Sin el coste medioambiental que tiene el achatarramiento prematuro de la flota
Sin subsidios y sin acceso a electricidad baja en carbono, el vehículo eléctrico es una opción menos favorable que los vehículos de bioetanol, ya que ahorra menos emisiones de GEI y aumenta el costo de propiedad para los conductores.
En Francia, el E85 (85% bioetanol) ya es la opción de movilidad baja en carbono más rentable, evita emisiones a un menor costo de propiedad en comparación con los automóviles eléctricos. Un sistema de subsidios que recompense diferentes opciones en función de su potencial de reducción de GEI durante todo el ciclo de vida fomentaría el desarrollo de las soluciones más eficientes, evitando atractivos artificiales a través de subsidios no sostenibles en el tiempo.
El atractivo del BEV no solo se está apoyando a través de las cuantiosas ayudas de los gobiernos, sino que se están obviando las emisiones en el ciclo de vida de estos vehículos y la producción eléctrica, además de no tener en cuenta el impacto económico y en emisiones que supone un achatarramiento prematuro y el desarrollo de las nuevas infraestructuras de producción y recarga.
Se adjunta el enlace al resumen de interesante estudio que profundiza, con una rigurosa metodología, en las emisiones en todo el ciclo de vida de diferentes tipologías de vehículos y en diferentes condiciones de uso. Analizando también diferentes escenarios de mejora tecnológica.